jueves, 16 de diciembre de 2010

Un ejemplo a seguir

Echo un mar de lagrimas 
Al verlo allí en la cruz 
Se acordó del niño que ella misma diera a luz. 
Y entre el firmamento y su mirada de dolor 
Bien supo serle fiel a tanto Amor. 

No rompió el silencio cuando el cielo se quebró 
No volteo sus ojos al final cuando expiro 
Se sintió caer pero así mismo no cayo 
Y amo a pesar de que el mundo lo entrego. 

Solo besos sus pies 
Y a Dios se lo ofreció 
Sin preguntar por que 
A todos perdono 
Pues entendió el Amor 
Que Jesús predico 
Que su Hijo predico 
Ella entendió el Amor que El enseño. 

Entre la llovizna, la tristeza y el temor 
Lo tomo en sus brazos cuando ya no respiro 
Junto con su alma le traspaso el corazón 
La espada que esa cruz todo lo consumo. 

No rompió el silencio cuando el silencio callo 
No volteo sus ojos y el sepulcro se cerró. 
Se sintió morir pero su fe permaneció 
Y Amo a pesar de que todo se oscureció.